Cómo Criar a nuestros Hijos

Cómo Criar a nuestros Hijos

Tomando Ventaja de las Motivaciones Innatas

Las motivaciones innatas contribuyen a la crianza y educación de los hijos si el padre las utiliza moderadamente y con equilibrio:

(1): La Inspiración: debe utilizarse en favor del niño, en el sentido de que el padre/educador debería ampliar la imaginación del niño. Sin embargo, los padres no deberían inspirar o llevar al niño a sentir miedo, como contarle historias de monstruos y fantasmas, etc.… Debe utilizarse moderadamente porque demasiada inspiración puede hacer que el niño sea seguidor sumiso de otros sin mostrar ningún tipo de independencia ([1]). Para tener éxito en la inspiración del niño, el padre/educador debe ser veraz y mostrar las cualidades que fomenta, como ser, el coraje y la paciencia. Él debe ser hábil en la forma que demuestra sus ideas, utilizando un tono de voz efectivo y conmovedor ([2]). El padre debe ser consciente de quien está inspirado a su niño. Él tiene que protegerlo de caer en la trampa de admirar cantantes y actores, él debe explicarle la negatividad que difunden en la sociedad, haciendo que el niño desapruebe su actividad en lugar ser inspirado por ellos, y tomaría a la gente piadosa y justa como su modelo a seguir ([3]).

(2) El Juego: Forma en el niño la capacidad de pensar y adquirir habilidades diferentes ([4]). En cuanto al juego en grupo, es una especie de escuela en la que el niño aprende el liderazgo, la obediencia, el compromiso y las medidas de conducta ([5]). También le enseña a aprender acerca de su futura carrera o roles sociales ([6]); el niño juega a veces a ser padre, maestro o médico y la chica juega a ser una madre y maestra o cualquier otra carrera que se adapte a su naturaleza. Sin embargo, tiene que haber algún equilibrio entre el juego en grupo y el juego individual, de modo que el niño no se retraiga y deje de interactuar con otros, él debe aprender a tratar con sus pares, tolerar daños, preservar sus derechos y convertirse en un jugador de equipo ([7]). El puede aprender todo eso mediante el juego grupal.

(3): Imitación: es un método para formar los hábitos y modales sociales del niño. La imitación suele ocurrir cuando el niño tiene un modelo que sigue y admira ([8]). El niño adquiere costumbres social positiva fácilmente si sus padres o tutores se caracterizan con estas costumbres. Si el padre/educador entrena a su niño para ser valiente ([9]), debería comenzar desde una edad temprana. La imitación se hace evidente en el carácter del niño al final de su primer año de edad ([10]), se inicia cuando el niño imita el padre sin intención, entonces esta imitación no deseada se convierte en una especie de orientación para el niño, dado que se siente apegado a sus padres a través de esta imitación, además de sentirse orgulloso de tener un modelo a seguir ([11]). Si los padres o los modelos a seguir son valientes, esto puede ser una cura efectiva para el miedo del niño. También asociarse con amigos o compañeros valientes ayuda a los niños a superar su miedo ([12]). La imitación puede ser eficaz para alentar al niño a tomar una medicina, comer sano y superar la pereza y otras características negativas. Por ejemplo, si el niño tiene un hermano mayor que come alimentos importantes para el desarrollo, como verduras, proteínas y todo tipo de nutrientes saludables, lo más probable es que el hermano o hermana imite a su hermano mayor.

            (4): Competencia constructiva: se origina en los sentimientos del niño y las capacidades que no aparecen excepto a través de la competencia ([13]). El padre/educador puede convertir la competencia en un método educativo si él se asegura que los niños que compiten tienen el mismo nivel de habilidades, por ejemplo no deberíamos hacer que un niño muy inteligente compita con un niño con inteligencia media; no sería justo para ambos. El padre/educador debe orientar a los niños para que se respeten mutuamente cuando están compitiendo y felicitar a los ganadores ([14]). Debe evitar cualquier tipo de comparación que pudiera despreciar o menospreciar al niño; él no debe utilizar la comparación como una forma de castigo que hace que el niño se sienta amargo y apocado. Si utilizamos la comparación, entonces deberíamos usarla para recordarle quien es mejor que él, pero de una manera inteligente para empujar al niño a trabajar más y, también, para recordarle quien es inferior a él para desarrollar su confianza ([15]). Todo esto debe hacerse con conciencia, equilibrio y sin exagerar.

(5): Cooperación: el niño prefiere el juego grupal cuando tiene cuatro años de edad ([16]). Los padres deberían beneficiarse de esta tendencia innata en el niño a pertenecer a un grupo, y hacerlo participar en banquetes y comidas compartidas y enseñarle a cooperar en la realización y organización de las cosas. El aprende del juego grupal altos valores y moral, como ser misericordioso con los más pequeños, la seriedad, la competencia sana, la amistad y el amor. La cooperación tiene efectos claramente positivos tales como la velocidad y facilidad de lograr tareas independientemente de qué tipo son, por ejemplo, la cooperación entre los miembros del hogar ayuda a limpiar, organizar y decorar la casa rápidamente.

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([1]) Kaifa Nurabi Atfalan por Mahmoud Al-Istanbouly: página 147-148.

([2]) Kaifa Nurabi Atfalan por Mahmoud Al-Istanbouly: página 147-148.

([3]) Manhay Al-Tarbia Al-Islamia por Mohamed Qutb: página 480.

([4]) Birnamay Amali Litarbiat Al-Osrah por Aminah Al-Iahia: página 23.

([5]) Wal-Tufula Al-Osrah por Zidan Abdul Baqi: página 250-255.

([6]) Wal-Tufulah Al-Osrah por Zidan Abdul Baqi: página 250-255, Mas'ulaiat Al-Abb Fi Tarbiat Al-Walad por Adnan Baharith: 422 de la página.

([7]) Tarbiat Al-Atfal Fi Rehab Al-Islam por Mohamed Al-Nassir y Jawala Darwish: página 148.

 ([8]) Al-Mushkilat Al-Sulukia por Nabih Al-Ghabrah: página 27-151.

([9]) Conversaciones del Dr. Spock con las madres, por el Dr. Benjamin Spock: página 72.

([10]) Al-Mushkilat Al- Sulukia por Nabih Al-Ghabrah: página 26.

([11]) Usul Al-Tarbia Al-Islamia por Abdul Rahman Al-Nahlawi: página 258-260.

([12]) Al-Mushkilat Al- Sulukia por Nabih Al-Ghabrah: página 151.

([13]) Manhay Al-Tarbia Al-Nabawia, por Mohamed Nour Swaid: 347 de página.

([14]) Kaifa Nurabi Atfalan por Mahmoud Al-Istanbouly: página 143.

([15]) Kaifa Nurbi Tiflan por Mohamed Ziad Hamdan: página 36-39.

([16]) Al-Mushkilat Al-Sulukia por Nabih Al-Ghabrah: página 188-192.